Hoy nos toca hablar del que probablemente sea uno de los países más inviables del mundo, una pequeña islita rebosante de excrementos de ave que sorprende por su capacidad de tomar siempre las peores decisiones posibles, una república "guananera" que parece empeñada en autodestruirse. Sin más preámbulos... bienvenidos a Nauru.
Geografía
La República de Nauru es un muy pequeño estado insular de Oceanía, con apenas 21 kilómetros cuadrados, sería el tercer país más pequeño del mundo, tan solo por detrás de Ciudad del Vaticano (0.44 kms2) y Mónaco (2 kms2)
Geográficamente hablando, Nauru limita con Islas Salomón y Tuvalu al sur, Papúa Nueva Guinea al oeste, Micronesia al norte y Kiribati al este. Nauru es una pequeña isla de fosfato rodeada de un arrecife que emerge cuando la marea es baja. La mayoría de la población vive en una estrecha franja costera. El interior de la isla es una gran planicie que cubre aproximadamente el 45 % del territorio y que se eleva unos escasos 65 metros sobre el nivel del mar.
Al suroeste de la isla hay una pequeña laguna llamada "Laguna de Buada". |
Historia
No sabemos a ciencia cierta cómo era Naurú antes de su colonización a finales del siglo XIX debido a la ausencia de fuentes escritas y los escasos restos arqueológicos que se han encontrado. Podemos suponer que al principio estaba poblada por melanesios y micronesios. En torno al año 1200 A.C llegó una oleada migratoria procedente de las costas chinas. La población autóctona y los recién llegados se organizaron en doce tribus, cada una con su propio dialecto del nauta, la legua original de la isla.
Estas tribus vivían del cultivo de cocoteros, plátanos, pandanus y takamaka, y de la cría de peces de leche en las lagunas de la isla. Naurú era una modesta isla que sin embargo resultaba sostenible; pero todo esto cambió con el colonialismo, a partir de ahí toda la historia de Nauru estaría vinculada a su principal y único recurso: el fosfato.
El azul de la bandera de Nauru representa el mar, la línea amarilla corresponde al Ecuador y la estrella blanca de 12 puntas representa las 12 tribus indígenas de la isla. La bandera sirve de mapa y muestra la ubicación de la isla de Nauru 1 grado por debajo de la línea ecuatorial. |
El capitán británico John Fearn, del barco ballenero Hunter, descubriría la isla para los europeos en noviembre de 1798. Le debió de causar buena impresión, ya que la llamó "Isla Agradable". Se cree que los primeros colonos de Naurú fueron náufragos que llegaron desde otras islas del Pacífico. En la década de 1880, llegó una tercera oleada migratoria compuesta por: fugitivos, convictos, desertores de barcos balleneros y vagabundos... lo mejor de cada casa. Estos colonos serían el primer contacto de los nauruanos con la civilización occidental, sin embargo, en lugar de traer desarrollo y civilización, los colonos introdujeron el alcohol y las armas de fuego.
En 1886 los gobiernos imperiales británico y alemán acordaron la partición de el Pacífico Occidental. En 1888 Naurú quedo bajo el protectorado alemán dentro de la de Nueva Guinea Alemana. A petición de los propios colonos, Alemania desarmó a la población y puso algo de orden.
Nauruanos y sus casas tradicionales en Arenibek en 1896 |
En 1901, Sir Albert Ellis, un geólogo neozelandés, descubrió que había grandes depósitos de fosfato tanto en Nauru como en Banaba (entonces llamada Isla del Océano). Efectivamente, Nauru era una de tres grandes islas de fosfato en el océano Pacífico (las otras son Banaba en Kiribati y Makatea en la Polinesia Francesa). Seis años después comenzaría la minería de fosfato en Nauru por medio de la compañía "Pacific Phosphate Co", de propiedad británica.
Durante la Segunda Guerra mundial, Naurú fue bombardeada y pasaría a manos de Japón entre 1942 y 1945; los japoneses que se desplazaron hasta la isla no lo pasaron muy bien, en algunos casos acabarían recurriendo al canibalismo para sobrevivir y quienes lo lograron serían juzgados por crímenes de guerra..
Escudo de armas de Nauru, "Lo primero, la voluntad de Dios" |
En 1947, tras la Segunda Guerra Mundial Nauru volvería a estar bajo control australiano, una relación tormentosa que duraría hasta la actualidad.
El Fosfato
Desde 1903 el yacimiento de fosfato de la isla fue explotado por sucesivas compañías coloniales o estatales. Este fosfato era relativamente barato y constituyó casi la única fuente de recursos de la isla durante casi un siglo, garantizando a los nauruanos un nivel de vida muy elevado durante varias décadas.
Durante las décadas de los 60s y 70s, Nauru tenía la renta per cápita más alta de todo el planeta, unos 50.000$ (frente a los 5.000$ de hoy en día). Es más, cuando Naurú obtuvo su independencias en 1968, a cada habitante de la isla le correspondía unos 2.4 millones de dólares.
Con una población muy reducida y enormes reservas de fosfatos y guano (la acumulación de los excrementos de aves marinas, murciélagos y focas que se emplea como fertilizante), el país se convirtió en uno de los principales proveedores de este recurso, la calidad de vida de isleños mejoró notablemente y a principios de la década de los 70s, Nauru era considerado un país desarrollado.
En un abrir y cerrar de ojos, Nauru pasó de ser un pequeño paraíso con altísimos ingresos a la ruina más absoluta. A pesar de que gran parte de las ganancias se habían enviado a fondos de inversión para garantizar los ingresos futuros cuando las minas se agotaran, los dirigentes nauruanos no fueron especialmente responsables y dilapidaron esta renta.
Niños jugando en una playa de Nauru junto a una plataforma de extracción abandonada (Foto: Mridula Amin) |
Tras haber acumulado hasta 2.000 millones de dólares los políticos de Nauru usaron los ahorros del país para pagar gastos de funcionamiento del Estado, completar presupuestos deficitarios año tras año y realizar nefastas inversiones. Esto unido a varios casos de corrupción hicieron que las reservas que en 1991 rondaban los 1.300 millones de dólares se vieron reducidas a 138 millones en 2002. En 2004 el país vendió sus últimos fondos para pagar la deuda externa quedando en la más absoluta bancarrota.
Desde entonces, el gobierno ha tenido que congelar los salarios públicos, realizar despidos masivos, privatizar las principales entidades públicas y cerrar la mayoría de sus embajadas y consulados.
Sin dinero no se pueden mantener hospitales (hoy en día no es posible una intervención compleja en Nauru), ni importar comida (lo cual causó un problema de salud que veremos más adelante) ni modernizar un sistema de telecomunicaciones que conecte Nauru con el resto del mundo.
Medio ambiente
La extracción intensiva de fosfatos por parte de las empresas inglesas había modificado el ecosistema de Nauru, dejando el 90 % del centro de la isla como un erial no cultivable. Tras cuatro décadas de minería descontrolada, el suelo de la isla quedó devastado; paradójicamente para un país que exporta fertilizantes, el suelo de Nauru no es muy fértil, por lo que ahora mismo el único cultivo viable son las palmas de coco. Las minas de fosfatos y guano, que ocuparon gran parte de la zona central y norte de la isla, exterminaron la poca vegetación nativa que existía y dejaron tras de si un suelo contaminado y acidificado por minerales como el potasio, el sodio o el amonio.
Con los filtros adecuados, Nauru tiene paisajes paradisiacos. |
Además de arruinar el 80% de la isla, el abandono de las minas dejó tras de si un paisaje lunar formado por pináculos de caliza de hasta 15 metros de altitud. La minería también ha tenido un impacto sobre la vida marítima, que se vio reducida en un 40% reduciendo las posibilidades de re-orientarse hacia la pesca. La llegada de especies invasoras como ratas, cerdos, perros, gatos y gallinas completó el desastre ecológico. Nauru quedó convertida en una isla inhóspita incapaz de producir ningún alimento o de garantizar la sostenibilidad del país.
Por si sus propios méritos no fuesen suficientes, el cambio climático amenaza seriamente a una isla que se alza unos escasos 65 metros sobre el nivel del mar. Ante la seria amenaza de quedar sumergidos bajo las aguas del mar, existen planes de evacuación para enviar a toda la población local hacia otros países.
Salud
Teniendo en cuenta que Nauru no pueden cultivar casi nada debido a la destrucción de su entorno, la práctica totalidad de los alimentos que se consumen deben ser importados desde Australia, Nueva Zelanda o Japón.
Nauru tiene la población "más grande" del mundo para uno de los países más pequeños |
Las consecuencias de esta dieta no se quedan ahí, además de los problemas relacionados con enfermedades renales y cardiopatías, Nauru tiene el nivel más alto del mundo de diabetes de tipo II, con más del 40 % de la población afectada.
Como muestra un botón: En 2003, Bernard Dowiyogo, el presidente del país, murió de un fallo cardíaco en Estados Unidos tras una larga lucha contra la diabetes. Su sucesor, René Harris, moriría también por fallo cardíaco relacionado con la diabetes cinco años después.
Inversiones y desinversiones
Todo empezó con el Hotel Mercure en Sydney (Australia), luego continuó con la Nauru House en Melbourne (Australia), que en el momento de su construcción en 1972 era el edificio más alto de la ciudad. Después se vendieron otros dos hoteles en Australia, el Centro Comercial Royal Randwick en Sydney y cualquier propiedad inmobiliaria que el gobierno de Nauru tuviese en el exterior (en Nauru no se habían revalorizado precisamente)
Un avión de la extinta Nauru Airlines |
Política interior
Nauru no se caracteriza por su estabilidad política, desde 1980 han tenido unos 33 presidentes, es decir, aproximadamente uno cada año y medio.
Entre los presidentes muertos por la diabetes, los casos de corrupción y mandatos que apenas llegan a los 20 días es difícil dotar al país de cierta estabilidad. Bernard Dowiyogo gobernó entre el 11 de noviembre y el 26 de noviembre de 1996 mientras que Kennan Adeang le sucedió del 26 de noviembre al 19 de diciembre de 1996.
Todo esto no hizo sino acrecentar la frustración de los habitantes de Nauru, que llegaron a montar algún conato de revolución, pero sin consecuencias mayores.
Parlamento de Nauru |
Política exterior
Aprovechando su condición de país miembro de las Naciones Unidas, Nauru se dedicó a carnavalear con su papel en la ONU. Cada día cambiaba su postura o amigos en función de lo que le prometiesen y no dudaba en reconocer como países a territorios que no tienen reconocimiento internacional si a cambio lograba algún ingreso.
Sello de Nauru |
Otro ejemplo sería el reconocimiento de Nauru a la independencia de Abkhazia y Ossetia del Sur en 2009, después de que Rusia le hiciera una "donación" de 50 millones de dólares en concepto de "ayuda humanitaria".
Un paraíso... fiscal
El resultado fue que Nauru se volvió el país favorito de la mafia rusa, que entre 1990 y 2000 ingresó cerca de 70 billones de dólares en los relajados bancos de Nauru. Esto saltó las alarmas del Grupo de Acción Financiera contra el Lavado de Dinero (FATF), del G7, que incluyó a Nauru en la lista negra de países que favorecen el lavado de dinero y el crimen internacional.
En 2023 Nauru se quedó sin bancos, el único banco australiano que proporcionaba a Nauru servicios bancarios anunció que saldría de la isla a finales de año. |
Como es lógico, esto tuvo un impacto negativo en el flujo de cooperación internacional hacia Nauru. Sin embargo no quisieron desaprovechar la oportunidad y llegaron a negociar con Estados Unidos la eliminación de las leyes a favor del lavado de dinero a cambio de una "pequeña ayuda financiera" para la isla.
Dentro de esta operación, Nauru estableció una embajada en la República Popular China (embajada que en realidad estaba bajo el control de los Estados Unidos), para facilitar la deserción científicos norcoreanos y funcionarios que cruzasen la frontera entre China y Corea del Norte. Supuestamente, gracias a esta operación consiguieron sacar de Corea a Kyong Wonha, el científico responsable del programa nuclear de Pionyang. Arriesgado juego sin duda...
Pasaporte de Nauru |
Pero la cosa no quedó aquí, otra de las ingeniosas fuentes de ingresos que se le ocurrió al gobierno de Nauru fue la venta de pasaportes al mejor postor. Según las declaraciones de un miembro del parlamento, altos funcionarios del gobierno de Nauru y servidores públicos del país vendían pasaportes nauruanos por aproximadamente 50.000$ a cualquier persona de cualquier lugar del mundo que lo solicitase.
Nauru comenzó siendo el refugio del dinero de los delincuentes y acabó siendo el paraíso de estos mismos delincuentes.
Tu vecino y amigo Australia
Centro de detención en Nauru |
La solución pacífica funcionaba así: Australia le paga aproximadamente 8.7 millones de dólares al año a Nauru a cambio de que el pequeño país insular se haga cargo de todos los extranjeros que hayan solicitado asilo en el país mientras sus solicitudes son estudiadas.
Campamento de refugiados en Nauru |
Una familia de refugiados en Nauru |
Si la solicitud era rechazada los refugiados volvían al centro de detención de Nauru, un lugar en donde los intentos de suicidio, las autolesiones y los problemas de salud mental se estaban disparando entre los menores de edad. Solo en 2018 una joven tuvo que ser trasladada a Australia tras pasar semanas en huelga de hambre, una niña de 12 años se quemó a lo bonzo tras varios intentos de suicidio y otro niño iraní vio como su hospitalización era rechazada por querer viajar con su padre. Ante la falta de medios para solucionar "el ambiente emocional tóxico" (UNICEF) de estos centros, la solución del gobierno de Nauru fue expulsar a Médicos sin Fronteras, la última organización que quedaba prestando ayuda a los refugiados.
Futuro
Actualmente los ingresos de Nauru provienen de dos fuentes:
- 500.000$ anuales procedentes de las modestas exportaciones de los pocos fosfatos que quedan en la isla
- A esto se suman 3 millones de dólares anuales por licencias para que los barcos extranjeros faenen en las aguas del país.
Estructura de almacenaje abandonada en la costa de Nauru |
En agosto de 2004, se publicó un estudio australiano en el que se afirmaba que Nauru tenía dos opciones: convertirse en "un mendigo y leproso del Pacífico asolado por la pobreza y las enfermedades, o llevar una vida sana y modesta" lo cual implicaba renunciar a su soberanía como república y pasar a formar parte de Australia, Nueva Zelanda o Fiyi. Ese mismo año, el presidente declaró el estado de emergencia nacional debido a la crisis económica y disolvió el Parlamento.
Desde entonces Nauru ha realizado maniobras desesperadas para salvar la situación, para no alargar más esta historia de despropósitos, repasaremos tan solo algunas de las más chifladas:
- El 15 de junio de 2005, Nauru se unió a la Comisión Ballenera Internacional (CBI); probablemente sobornada por Japón, para que votara sobre la reanudación de la caza comercial de ballenas en Ulsan, Corea del Sur.
- En 2007, el ministro de Industria anunció un programa de rehabilitación y renaturalización que en el plazo de 20 años convertiría a Nauru en la isla tropical que fue una vez.
- Además, existen programas entre el gobierno de Nauru, Australia y Nueva Zelanda para crear un centro de reparación y fabricación de barcos en Nauru... una isla que no tiene ni un solo puerto.
- Uno de los últimos intentos ha sido posicionarse como un destino turístico importante en el Pacífico… para ello Nauru cuenta con 2 tristes hoteles con capacidad para 250 visitantes. Tienen mucho trabajo por delante, con 200 visitantes al año, actualmente Nauru es el país menos turístico del mundo.
- A modo de curiosidad, durante la pandemia de Covid-19, Nauru fue el único país que logró vacunar a toda su población antes de que se registrase un solo caso de infección. Alguna ventaja tenía que tener la insularidad.