21 marzo 2023

Xanadú (Imperio Mongol) - China

Sitio arqueológico de Xanadú

Xanadú, también conocida como Shangdu (“Capital superior” en chino) o Sandu (en mongol), era la capital del imperio mongol y la residencia de verano de la dinastía Yuan de China. Esta legendaria ciudad estaba ubicada cerca de lo que hoy en día es la ciudad de Shangdu, en el interior de Mongolia (al norte de China) unos 350 kilómetros al norte de Pekín y 28 kilómetros al noroeste de Duolun.

Tras permanecer olvidada durante siglos, en los que Xanadú se convirtió en un ideal romántico, recientemente se han empezado a recuperar los pocos restos que aun quedan. Desde 2012 forma parte del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO debido a su importancia histórica y a su combinación única de las culturas mongol y china.

Origen:

Durante el siglo XIII, el Imperio mongol gobernó la mayor parte de Asia. Inicialmente su capital estaba en Karakorum (Qaraqorum), en Mongolia, pero a medida que se expandían sus fronteras surgió la necesidad de buscar una nueva ubicación, más céntrica, mejor comunicada y que permitiese controlar de cerca las nuevas tierras conquistadas. Así fue como en el año 1263 la sede del imperio mongol se mudó a Xanadú, una jovencísima ciudad en el noreste de China. 

Esta ciudad se había creado a partir de una idea visionaria del entonces emperador Kublai Khan, nieto de Gengis Khan. Su intención era crear una nueva urbe que sirviese de capital y que sirviese para consolidar su poder en estas nuevas regiones. Para ello Kublai Khan tenía un sueño, una ciudad fastuosa y moderna que aunase las diferentes culturas de su reino: la cultura agraria china y las costumbres nómadas del norte.

Retrato del emperador Kublai Khan

Dicho y hecho, entre 1252 y 1256 se diseñaron los planos de la nueva ciudad, un diseño que corrió a cargo de Liu Bingzhong, arquitecto jefe y consejero del Kublai Khan. Liu Bingzhong (1216-1274), de origen chino, era un reconocido arquitecto y un poderoso ocultista, famoso por combinar ambas habilidades en sus proyectos. El peculiar estilo de Liu quedaría claramente reflejado en su diseño de la ciudad: con un esquema tradicional chino de recintos cuadrados y concéntricos, la ciudad era muy respetuosa con los principios del Feng Shui y se diseñó teniendo en cuenta su posición con respecto a los montes y ríos cercanos.

El esquema "profundamente chino" aplicado en esta nueva capital no fue un rasgo accidental, el propio emperador mongol supervisó las obras en persona para asegurarse de que Xanadú reflejaba el mensaje que quería transmitir: el futuro iba a ser una mezcla de las culturas tradicionales nómadas y agrícolas. Acababa de nacer un nuevo imperio, moderno y unificado...

En 1626, el cartógrafo inglés John Speed representó el reino del gran Khan en el noreste de China. En su mapa, colocó Cambalu (Xanadú) al este de la metrópolis de Cathayan.

La ciudad:

Como ya hemos comentado antes, los edificios y las calles de Xanadú se diseñaron siguiendo el clásico plano cuadrado chino y teniendo muy en cuenta los principios del Feng Shui. Uno de los factores más influyentes a la hora de diseñar la nueva ciudad sería su relación con las montañas del norte y el río existente en el sur. Como resultado, los muros, calles y edificios de Xanadú se construyeron siguiendo un eje norte-sur.

La ciudad consistía en un gran cuadrado delimitado por murallas y torres defensivas, en cuyo interior se disponían las calles siguiendo una cuadrícula norte-sur. Dentro de la ciudad existían otras ciudades menores, también con forma cuadrada y rodeadas por los mismos muros de tierra. Por último, en el exterior de la ciudad había un coto de caza que como no podía ser menos, también estaba cerrado.

Queda poco con lo que recrear Xanadú, pero aun hoy en día se puede apreciar su diseño de inspiración china compuesto por ciudades concéntricas cuadradas.

Los muros exteriores de la ciudad tenían entre 3,5 y 5,5 metros de altura y permitían el acceso a la ciudad mediante seis puertas, dos en los lados este y oeste y una en los lados norte y sur. Cada lado del muro perimetral contaba con seis torres.

En el interior de estos muros se encontraba la "ciudad exterior", un cuadrado de 2200 metros de lado compuesto en su mayoría por viviendas de barro y madera. En esta ciudad exterior es donde vivía la mayoría de la población.

Dentro de este recinto, en la esquina sureste, encontramos otra "ciudad interior" , también formando un recuadro de aproximadamente 1400 metros de lado con un muro exterior de ladrillo de unos 3-5 metros de altura que además integraba cuatro torres.

En el interior de ambas ciudades existía un palacio de aproximadamente 550 metros de lado, donde el Khan residía durante el verano. Dicho palacio cubría una superficie equivalente al 40% del tamaño de la Ciudad Prohibida en Pekín y estaba construido sobre una plataforma elevada hecha de tierra, piedras y vigas de madera. El palacio así como otros edificios relevantes de la ciudad, como los templos, estaba construidos con una combinación de madera, piedra, mármol y azulejos.

Inmediatamente al noroeste de la ciudad había un coto de caza que consistía en prados, bosques y lagos y que estaba poblado por animales semi-domesticados como los ciervos. El coto de caza también se utilizaba para la cetrería y para el pastoreo de rebaños de yeguas blancas y unas vacas especiales cuya leche estaba reservada para los khans. Para mantener a los animales dentro y a los intrusos fuera, toda la reserva estaba cerrada con un muro de tierra y un foso.

Planta del palacio de Kublai Khan

Inicialmente, este asentamiento se llamaba Kaiping ("abierta y plana"), pero en 1264 Kublai Khan la renombró como Shangdu, que significa "capital superior", y que por algún motivo extraño se tradujo como "Xanadú"

La combinación de elementos arquitectónicos chinos y mongoles, la libertad religiosa (con presencia de varios templos budistas), los cotos de caza (una de las pasiones de los mongoles) y su ubicación estratégica entre las estepas mongolas y las llanuras agrícolas de China hacían de esta ciudad un lugar único en el mundo (y en la historia). Tal y como el Khan pretendía, Xanadú integraba la cultura mongol y china a la perfección, por lo que pronto se convirtió en todo un símbolo de su reinado.

Auge:

A pesar de su innegable éxito como simbolismo, esta mezcla no acabó de convencer a todos. Los mongoles más conservadores pensaban que se habían abandonado sus tradiciones para adaptarse a la "vida blanda" de los chinos. Por otro lado, los funcionarios chinos se desesperaban ante la total ausencia de protocolos o normas. A pesar de las reticencias, durante 10 años (entre 1263 y 1273), Xanadú fue la capital del Imperio mongol y su tarjeta de presentación de cara al exterior. 

A finales de siglo, Xanadú contaba con unos 100.000 habitantes, una población que llegaría a duplicarse durante su máximo apogeo. La ciudad cubría unas 25.000 hectáreas y contaba con un gran suministro de agua gracias a los abundantes manantiales naturales existentes en la zona; la única sombra eran las constantes inundaciones, que acabaron siendo corregidas con la apertura del canal de Tiefan'gan. 

Monumento memorial de Genghis Khan y Kublai Khan en Holin Gol, China.

Con frecuencia la ciudad albergaba grandes fiestas y cacerías, pero no todo eran juergas, también era una escala muy importante en la Ruta de la Seda y servía de sede para las reuniones de las élites Han y mongolas. 

En el año 1260 se celebró una reunión de los principales jefes tribales mongoles (un khuriltai), en la cual se proclamó oficialmente a Kublai como el Gran Khan o "gobernante universal" del Imperio Mongol. Quince años después, en 1275, el Gran Khan convocaría otro khuriltai en Xanadú, esta vez para decidir cómo enfocar su campaña contra la dinastía Song del sur de China (960-1279). Cuatro años después de esta reunión, el estado chino colapsaría dejando vía libre al pujante imperio mongol. 

Además de su importancia política, la ciudad también desempeñó un papel importante en el desarrollo religioso en la región, ya que fue el escenario de un intenso debate entre las religiones budista y taoísta que derivó en el auge y difusión del budismo tibetano en el norte de China. Además, la ciudad acogió a muchos viajeros deseosos de ver el legendario esplendor de los gobernantes asiáticos, siendo el más famoso de ellos Marco Polo.

Xanadú según Marco Polo

Tras la muerte de Gengis Khan, los kanes mongoles abrieron el imperio a los viajeros occidentales, permitiendo que exploradores y mercaderes pudiera transmitir las maravillas del Oriente a los europeos. Lo cierto es esta campaña de aperturismo tampoco dejó muchos testimonios. Para conocer lo que era este ciudad sólo nos podemos guiar por lo que narra en sus crónicas su visitante más célebre en Occidente: Marco Polo. 

La caravana de Marco Polo (Catalan Atlas, 1375)

El explorador veneciano Marco Polo (1254-1324) viajó por toda Asia y sirvió en la corte de Kublai Khan entre los años 1275 y 1292. A su regreso a Europa, Marco escribió sus memorias y sus experiencias en su famoso (y fantasioso) libro “Las Maravillas del Mundo”, más conocido como “Los viajes de Marco Polo”, publicado por primera vez en 1298.

Dice la leyenda (así es como deberían considerarse estas crónicas) que Xanadú tenía 60 oficinas gubernamentales, 160 templos ancestrales y santuarios de incienso. La Ciudad Exterior, separada por un muro de tierra, tenía un carácter defensivo y albergaba palacios, pabellones, y más de treinta salas, lo cual nos da una idea de la grandeza que suponía para su época, máxime en una cultura cuyas casas solían ser carpas desmontables. 

En el Libro 1, capítulo 57 de esta magnífica obra, Marco Polo describe Xanadú, a la que llama Shandu. A continuación se muestra un extracto de este capítulo:
Partiendo de la última ciudad mencionada [Changanor], y siguiendo un viaje de tres días en dirección noreste, se llega a una ciudad llamada Shandu, construida por el gran khan Kublai, que ahora reina. En este hizo levantar un palacio, de mármol y otras piedras preciosas, admirable también por la habilidad desplegada en su ejecución. Los salones y las cámaras son todos dorados y muy hermosos... Dentro de los límites del parque real hay prados ricos y hermosos, regados por muchos riachuelos, donde pastan una variedad de animales del tipo de ciervos y cabras, para servir como alimento para los halcones y otras aves empleadas en la caza... En el centro de estos terrenos, donde hay una hermosa arboleda, ha construido un pabellón real, apoyado sobre una columnata de hermosos pilares.
Kublai Kan en una expedición de caza (Liu Guandao, 1280)

El Palacio:

Según este relato, el Kublai Kan recibió al mercader veneciano en 1275 en un palacio revestido de mármol muy fino y cuyas habitaciones estaban forradas con pan de oro y pinturas de hombres, bestias, pájaros, árboles y flores, todo ello con un arte tan exquisito que Marco Polo quedó prendado. 

Efectivamente, el nuevo khan no quería saber nada de sus humildes raíces nómadas. A diferencia de su abuelo, el fundador del Imperio mongol Genghis Khan, no estaba dispuesto a vivir como un pastor en precarias tiendas de campaña (yurtas) ni a dirigir su enorme imperio desde un asentamiento nómada y provisional. En lugar de eso, creó una nueva y flamante capital, optó por un estilo de vida más sedentario y mandó construir un hermoso palacio desde el que dirigiría su pujante imperio. 

Montado a caballo y con un leopardo caminando detrás suyo, el Khan fue mostrando a Marco Polo el palacio y todas las maravillas que lo rodeaban. El italiano plasmaría en sus escritos este exótico lugar siendo a día de hoy la descripción más detallada que se conserva de Xanadú. 

Actuales ruinas del palacio principal

El palacio estaba protegido por una muralla defensiva y compartía espacio con unos fastuosos jardines, que de nuevo asombraron al viajero italiano. En dichos jardines había arroyos, fuentes y prados llenos de animales salvajes o adiestrados, entre ellos 200 halcones.

Pero este no sería el único palacio que sorprendió a Marco Polo, en el jardín había también un curioso palacio desmontable hecho de caña dorada con columnas lacadas, en el que dormía el gran kan cuando las temperaturas eran muy elevadas. El carácter efímero y funcional de esta construcción sin duda fue algo que impactó al mercader: 

Es dorado por todas partes y tiene un acabado muy elaborado por dentro. La columnas son lacadas y en cada uno de ellas hay un dragón dorado, la cola está unida a la columna mientras que la cabeza y las garras soportan el arquitrabe.
El techo, como el resto del palacio, está formado por cañas cubiertas con un barniz tan fuerte y excelente que ninguna cantidad de lluvia las pudre. Estos bastones tienen unos tres palmos de circunferencia y de 10 a 15 pasos de longitud. Se cortan en cada nudo, y luego se parten longitudinalmente las piezas para formar dos tejas huecas, y con estas se cubre el techo de la casa. Sólo es necesario clavar las tejas de caña para evitar que el viento las levante.
Todo el Palacio está construido con estas cañas que sirven para una gran variedad de propósitos útiles. La construcción del Palacio está pensada para que puede montarse y desmontarse con gran rapidez donde quiera que el Emperador ordene. Una vez montado el palacio se asegura contra el viento con más de 200 cuerdas de seda.
El Khan habita aquí, unas veces en el Palacio de Mármol y otras en el Palacio de la Caña, durante tres meses al año: junio, julio y agosto. Prefiere esta residencia, porque nunca hace calor. Cuando llega el día veintiocho de la Luna de agosto se marcha y el Palacio de caña es despedazado.

Declive:

Todo eran risas en Xanadú hasta que en 1274 a Kublai Khan se le ocurrió otra idea visionaria y decidió trasladar su sede aun más al sur, hasta Zhōngdū, la antigua capital de la dinastía Jin.

Actualmente, el sitio arqueológico de Xanadú se encuentra en Xilin Gol, a 460 kilómetros de Pekín y a 560 kilómetros de Hohhot, capital de Mongolia Interior.

Zhōngdū (“capital media” en chino) se había convertido en un poderoso símbolo de la toma de posesión de China por parte de los mongoles, así que Kublai Khan decide fijar allí su residencia y el centro de poder de su imperio.

En 1266 comenzó a construir la que sería su sede de invierno y ocho años más tarde Zhōngdū se convertiría en la nueva capital del imperio y en la sede de toda la dinastía Yuan mongola (1271-1368). Sin duda la nueva ubicación triunfó, con el tiempo, Zhōngdū sería renombrada como Khanbaliq (o Daidu) y más tarde con su nombre actual: Pekín

Mientras tanto, Xanadú pasó a ser la capital de verano debido a su clima más fresco. Lejos de ser abandonada, cada verano el Khan y su séquito regresaban a esta ciudad en busca de temperaturas menos sofocantes. Xanadú siguió funcionando como capital de verano hasta la caída de la dinastía Yuan.

No obstante, al dejar de ser la capital del imperio, la ciudad comienza un lento declive. Xanadu sobrevivió a la caída de la dinastía Yuan, pero en el año 1369 sería ocupada por el ejército Ming, que incendió la ciudad y restauró su nombre original, Kaiping. El último Khan reinante, Toghun Temur, huyó de una ciudad, que tras un periodo de abandono quedaría definitivamente desierta en torno al año 1430.

Los pocos restos que se conservan en el sitio arqueológico de Xanadú

Xanadú según Samuel Taylor Coleridge (1797)

Cuando Xanadú ya no era más que un recuerdo borroso en Oriente, comienza su leyenda en Europa... En el siglo XVII, el clérigo Samuel Purchas utilizó el texto de Marco Polo para describir Xanadú en "Purchas' Pilgrimes"

En 1797, el filósofo y poeta romántico Samuel Taylor Coleridge estaba leyendo el relato de Purchas cuando se quedó dormido en su silla y tuvo un extraño sueño (en parte inspirado por el opio). En su sueño, Coleridge imaginó una Xanadú legendaria que posteriormente plasmaría en el poema "Kubla Khan", las imágenes descritas por Samuel Taylor Coleridge se convirtieron en uno de los poemas más conocidos del idioma inglés, un texto que comenzaba con estos versos:

"En Xanadú, Kublai Khan
se hizo construir un fastuoso palacio (una cúpula del placer):
allí donde el sagrado río Alfa discurría
a través de grutas inconmensurables para el hombre
hasta precipitarse en un mar sin sol.
Así pues cinco millas de terreno fértil
fueron cercadas con muros y torres;
y surgieron jardines en los que brillaban sinuosos arroyos,
y donde crecían abundantes árboles de incienso;
y había bosques tan viejos como las colinas,
rodeando los prados iluminados por el sol."

El poema Kubla Khan de Samuel Taylor Coleridge

El profundo sueño de Coleridge comienza como el texto original de Purchas, pero después se ramifica y adorna con una descripción detallada de la ciudad. El poeta mientras dormía intuyó una serie de imágenes y de palabras que simplemente se manifestaban ante él. Al cabo de unas tres horas despertó con la sensación de haber tenido una epifanía en la que había compuesto un poema de unos trescientos versos sin ningún esfuerzo aparente. Recordaba cada verso con claridad y empezó a transcribir el fragmento que hoy conocemos hasta que una visita inesperada lo interrumpió... tras la visita, le resultó imposible recordar el resto. Como narra el propio Coleridge:

“Descubrí, con no pequeña sorpresa y mortificación que si bien retenía de un modo vago la forma general de la visión, todo lo demás, salvo unas ocho o diez líneas sueltas, había desaparecido como las imágenes en la superficie de un río, en el que se arroja una piedra…”

El gran Jorge Luis Borges narraría esta anécdota en su relato “El sueño de Coleridge”. A día de hoy, quizás la obra más famosa de Samuel Taylor Coleridge sea Rime of the Ancient Mariner (1798), pero a pesar de tratarse de un poema incompleto, Kubla Khan (escrito en 1797 y publicado en 1816) se convirtió en uno de los poemas más aclamados por la crítica de su época. De este modo, Coleridge, que no se basaba en ninguna experiencia personal ni había visitado la ciudad nunca en su vida, transformó Xanadú en todo un símbolo de prosperidad y opulencia que perdura hasta nuestros días. 

Xanadú en el imaginario popular

En cierto modo, Xanadú dejó de ser una ciudad en ruinas para transformarse en un concepto romántico que aparecería en numerosas obras literarias, películas, videojuegos...

En 2006, la Unión Astronómica Internacional (UAI) dio el nombre de Xanadú a una región de Titán, la luna de Saturno. Esta zona despertó un interés considerable en la comunidad científica cuando posteriores análisis con radar desvelaron un terreno bastante similar a la Tierra, con ríos de metano y etano, montañas de hielo y dunas de arena.

Formación circular en la Xanadú de Titán

Hemos visto a Xanadú en el cine desde tiempos muy remotos, casi siempre como una metáfora del lujo y la opulencia bastante alejada de su imagen real. "Xanadú" era el nombre de la propiedad de Charles Foster Kane en la película "Ciudadano Kane". La película de 1980 "Xanadú" protagonizada por Gene Kelly y Olivia Newton-John también es una referencia al poema de Coleridge y también se guía por la memoria estética de la capital del imperio mongol.

Xanadú en la actualidad

De vuelta a la realidad, el británico Steven Bushell llegó aquí en el año 1872 y descubrió que tan famosa ciudad había quedado arrasada y solo se conservaban algunos restos de templos, bloques de mármol, tejas y azulejos. Xanadú se había convertido en una cantera local que los lugareños usaron durante siglos para hacer sus casas.

Cuando se iniciaron en el año 1990 las labores arqueológicas, muchos de los restos se habían perdido Solo quedaban ruinas y los cimientos de lo que parecían palacios y templos, también se conservan algunas tumbas, un canal y varias vías fluviales, todo ello rodeado por un montículo cubierto de hierba que antaño era la muralla de la ciudad.

Restos de una construcción de expuestos en el museo de Xanadú

Hoy en día, el sitio arqueológico de Xanadú está catalogado como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y ocupa una extensión de 484.000 m2, de los que 9.000 m2 corresponderían al palacio. Los restos más visibles son las paredes de tierra, aunque también hay una plataforma circular de ladrillos a nivel del suelo en el centro del recinto interior. Desde el año 2002, se ha llevado a cabo un esfuerzo de restauración a pesar del cual la Xanadú real sigue siendo muy decepcionante en comparación con su leyenda.

Legado

Aunque hoy apenas quede nada de esta fastuosa urbe, su relevancia histórica y su importancia como símbolo perdura hasta la actualidad. Xanadú fue el más visible ejemplo de un cambio en la mentalidad y la forma de gobernar de los mongoles, que pasaron de ser un violento ejercito invasor a integrarse perfectamente en la cultura china. 

En 1279 el imperio mongol alcanzó su máxima extensión

Si Kublai Khan hubiese optado por seguir las tradiciones de sus antepasados, hubiese contado con un reducido ejercito para imponer su idioma, religión y costumbres a millones de chinos, con las consecuentes revueltas y un más que probable desgaste del gobierno.

En lugar de eso, Kublai optó por abrazar la cultura china (algo común en muchas de las potencias que han invadido este país) y trató a todos sus ciudadanos con relativo respeto y libertad. Esto le permitió unificar a todo un pueblo que siguió unido cuando cien años después su dinastía fue derrotada. 

No fue fácil, Kublai tuvo que aguantar críticas internas por amoldarse a las costumbres del enemigo y llegó a sufrir varios ataques por parte de su propia familia. Sin embargo el resultado fue un imperio unido y moderno, la semilla de un nuevo país que supo adoptar lo mejor de los mongoles (un magnífico servicio postal por ejemplo) al mismo tiempo que mantenía sus tradiciones y cultos.

La estatua de Gengis Khan en la ribera del río Tuul, en Tsonjin Boldog (a 54 km de la capital de Mongolia, Ulán Bator) es la mayor estatua ecuestre del mundo, con 40 metros de altura.

Así como Gengis Khan es una figura de culto en su Mongolia natal (y un antepasado lejano de buena parte de los humanos actuales), hoy en día Kublai Khan sigue siendo muy respetado en toda China y se le considera uno de los padres de la nación, algo ciertamente insólito para un invasor extranjero. 

En cierto modo su huella es más duradera y aunque ya no queden mas que ruinas de Xanadú, no se puede negar la importancia de su gobierno, de las ciudades que construyó (Pekin) y de la nación que logró unir (China). Larga vida al Khan!!

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