07 marzo 2021

Ryugyong Hotel - Corea del Norte


Los edificios abandonados tienen un extraño atractivo, un especie de morbo insano al comprobar cómo sería el planeta sin nosotros... si además el edificio es absurdamente mastodóntico, la estampa se vuelve aun más desoladora, muchas de estas construcciones se transforman en un monumento imposible de ignorar que nos recuerda nuestras aspiraciones frustradas y nuestras limitaciones. 

Ryugyong Hotel, es un extraño hotel fantasma en Corea del Norte, calificado como "el peor edificio del mundo", lleva 30 años sin un solo cliente. Su nombre oficial es Hotel Ryugyong, aunque muchos lo conocen como el Edificio 105 por su número de plantas.

Con su cúpula puntiaguda y su forma piramidal, Ryugyong Hotel se alza imponente sobre Pyongyang, vigilando desde sus 330 metros de altura a los habitantes de la capital norcoreana, que llevan años acostumbrados a sus fallidos intentos de apertura. Las habitaciones de sus 105 plantas jamás han albergado ningún inquilino. 

Sus comienzos fueron triunfales, de haber finalizado a tiempo, se habría convertido en el séptimo rascacielos más alto del mundo y el primer hotel de gran altura de su época. Pero no fue el caso... La construcción del edificio empezó en 1987, el gobierno norcoreano concibió el Hotel Ryugyong como una forma de atraer inversores occidentales y anunció que abriría casinos, clubes nocturnos y salones japoneses. Se esperaba que tras dos años de trabajos estuviera terminado, pero algunos problemas con los métodos de construcción y los materiales empleados frenaron su avance, que se vio detenido por completo en 1992 a causa de la peor crisis económica del país, ocasionada por el bloqueo soviético.


Aspecto del Hotel durante su etapa inconclusa (1992-2008), con su emblemática grúa abandonada en la cúspide.

Según la prensa japonesa, Corea del Norte invirtió unos 750 millones de dólares, el 2% de su PIB, en este rotundo fracaso. Durante más de una década, el rascacielos a medio acabar, vacío, con una grúa de construcción oxidada en su cima, se convirtió en un recordatorio de los sueños frustrados de este país asiático.

La calidad de la construcción tampoco se salva, muchos analistas dicen que el edificio es una deshonra para las autoridades norcoreanas y dudan de que se pueda reconducir. Varias reseñas periodísticas lo han calificado como una construcción mediocre e insegura. Una delegación de la Cámara del Comercio de la Unión Europea en Corea del Norte lo examinó y lo llegó a designar como "el peor edificio del mundo" afirmando que su estructura era irreparable. Varios medios lo han apodado el "hotel maldito" o el "hotel fantasma", y la revista estadounidense Esquire lo declaró el "peor edificio en la historia de la humanidad".

En 2008, tras 16 años de abandono, Orascom Telecom, un conglomerado egipcio de telecomunicaciones, anunció sus planes de reparar el hotel en asociación con una pequeña firma local. Esta actuación se englobaba dentro de un ambicioso plan a gran escala para "embellecer la ciudad" poner en funcionamiento tranvías, y engalanar teatros y fachadas de edificios. La empresa firmó un contrato de 400 millones de dólares con el gobierno norcoreano y dedicó más de 180 millones de dólares en recuperar el gigantesco hotel, que vio como sus obras se retomaban. 

Un ejército de unos 2.000 trabajadores comenzó a colocar paneles de cristal para cubrir el cemento gris de la torre (que sin embargo había estado expuesto a la intemperie durante años sin ningún recubrimiento) y varios anillos que coronan el edificio allí donde, supuestamente, iba a haber un restaurante giratorio, según explicó el jefe de operaciones de Orascom, Khaled Bichara. 


En septiembre de 2012, Orascom reveló por primera vez imágenes del edificio por dentro: un vasto recibidor de cemento completamente vacío con unas barreras metálicas en el borde de cada piso. 

No obstante, la operadora de hoteles Kempinski Group, encargada de dirigir el hotel, afirmó que el edificio estaría en funcionamiento hacia mediados de 2013. No fue el caso. Hubo falsas esperanzas de nuevo en diciembre de 2016, cuando se vieron unas luces trabajando en la cúpula, pero estas luces al igual que las esperanzas de los norcoreanos, se terminaron apagando.

En 2017, 30 años después de que comenzara su construcción, parecía que su historia podría tomar un nuevo giro. La restauración del Ryugyong era una prioridad en la agenda de Kim Jong-un, las autoridades retiraron los muros que rodeaban las obras del edificio y colocaron un cartel propagandístico con un mensaje: "La poderosa nación del cohete". Un día después, Corea del Norte probó su segundo misil balístico intercontinental, que voló más lejos que cualquier otro misil lanzado por el régimen norcoreano hasta la fecha. 


Actualmente, Ryugyong Hotel es la pantalla de proyector más cara del mundo (abc.net.au)

Sin embargo, hoy en día el extraño hotel sigue sin abrir al público. A las puertas del edificio, dos pasarelas conducen hacia su entrada, pero sigue siendo un misterio cuándo darán la bienvenida a un inquilino por primera vez.


+ info: Wikipedia