El Túnel de Guoliang es una impresionante ruta excavada a mano en la roca que permite conectar al pueblo de Guoliang con el mundo exterior |
Guoliang es un pequeño pueblo chino situado en lo más alto de las escarpadas montañas de Taihang, en la provincia de Henan. A pesar de lo recóndito de su ubicación, el pueblo tiene más de 2.000 años de antigüedad, y su nombre homenajea al líder de una revuelta de campesinos que vivió durante la dinastía Han (entre el 206 AC y el 220 DC aproximadamente).
Este pueblo siempre ha vivido aislado del exterior, durante siglos el único acceso eran unas estrechas escaleras excavadas en las paredes de la montaña. Las escaleras se componían de 720 insufribles escalones de madera tallados en las empinadas paredes que rodeaban el pueblo. Estas escaleras eran inestables, resbaladizas y no contaba con ninguna medida de seguridad, lo cual la valió el sobrenombre de "la escalera del cielo".
Para los habitantes de Guoliang, salir al exterior de su pueblo era una tarea tan agotadora como peligrosa. Durante años, los 350 habitantes de Guoling solicitaron sin éxito una solución al gobierno, un camino alternativo que conectase al pueblo con el exterior sin tener que padecer las temibles "escaleras del cielo". Sin embargo, nadie hizo caso a sus peticiones.
La única escuela de la región estaba al pie de las montañas, eso suponía que muchos alumnos tenían que bajar y subir las divinas escaleras a diario; un día de invierno, una copiosa nevada dejó las escaleras especialmente peligrosas provocando que una niña de 10 años se resbalase y cayese por el abismo.
Los habitantes de Guoling no parecen propensos al vértigo |
Nadie escuchaba las quejas del aislado pueblo de Guoling, así que tras el trágico accidente de 1972, las autoridades locales y los habitantes del pueblo decidieron arreglar el problema por sí mismos. El pueblo seleccionó los 13 hombres más fuertes del pueblo formando un pequeño equipo que lideraría el ingeniero Shen Mingxin.
Sin más herramientas que sus manos, algunos utensilios rudimentarios y mucha fuerza de voluntad, estos sacrificados trabajadores comenzaron la faraónica tarea de tallar, centímetro a centímetro, un túnel en la pared vertical de la montaña. Al principio la tarea fue durísima; en los primeros tres días apenas habían logrado un metro de profundidad. Durante la excavación, varios aldeanos perdieron la vida debido a accidentes y derrumbes, siendo inmediatamente reemplazados por otro trabajador.
A pesar de los problemas y de lo titánico de la tarea, cinco años más tarde el equipo había logrado excavar 1,2 kilómetros de túnel, con unos 5 metros de altura y aproximadamente 4 metros de ancho.
A lo largo de 1,2 km el túnel de Guoliang "cose" la montaña de Taihang |
El 1 de mayo de 1977, el pueblo de Guoling inauguraba un túnel que debía facilitar sus relaciones con el resto del país y hacerles partícipes de la apertura turística de China. Gracias a la labor de un equipo de valientes, Guoliang pudo conectarse con el mundo exterior, eso sí, los desafíos a la muerte no habían terminado...
A pesar de ser toda una hazaña, un túnel toscamente excavado a mano en la montaña no podía resultar muy seguro, en algunos puntos del recorrido los pilares se desmoronaban provocando derrumbes. La obra inicial estaba pensada para tres personas y no contaba con ninguna medida de seguridad, por lo que más tarde tuvo que ser consolidada y mejorada, esta vez con maquinas. Entre las medidas implantadas se incluyeron pequeños muros entre el precipicio y la carretera y zonas apuntaladas para evitar nuevos derrumbes.
Pese a ser considerada una de las rutas más peligrosas del mundo, el túnel hoy es lo suficientemente ancho para permitir el paso de coches y pequeños autobuses.
Su mayor peligro es el precipicio que la acompaña, pero no es el único, también hay curvas de bajada muy pronunciadas, contra-curvas ciegas en las que no es posible ver quién viene de frente, giros impredecibles y un constante peligro de derrumbe.
Además, son frecuentes los cambios de luz entre los espacios abiertos y cerrados, restando visibilidad, o cegando en algunos casos, a los sufridos conductores que se atreven a adentrarse aquí.
Toda la zona se modernizó y se adaptó a las necesidades de esta nueva fuente de ingresos, tras cientos de años sin ser escuchados, los habitantes observaban atónitos como se construían puentes y caminos alternativos para los excursionistas y viajeros, ya que el acceso al túnel no siempre está abierto debido a su inestabilidad.
Alojamientos en el pueblo de Guoliang |
Al mismo tiempo, Guoliang se convertía en un acogedor pueblo turístico, con varios hoteles y restaurantes. Su ubicación en un impresionante valle y rodeado de enormes montañas y acantilados añade un plus al morbo de muchos visitantes por visitar esta peculiar construcción.
Hoy en día, el túnel está incluido dentro del Parque Nacional Wanxian Shan, desde cuya entrada salen autobuses para transportar a los visitantes hasta el pueblo en lo alto de las montañas, desde allí hay numerosas rutas de senderismo para disfrutar de las magníficas vistas. Afortunadamente, solo los habitantes de Guoliang pueden utilizar sus vehículos particulares para entrar o salir del pueblo, por lo que muchos turistas optan por recorrer el túnel a pie para poder disfrutar la espectacular obra y su no menos espectacular abismo.
+info: Clarín - DestinoInfinito